Preparación por ultrasonidos de muestras para el análisis de THC
- La extracción por ultrasonidos es un método probado para la producción de THC, pero también puede utilizarse para fines analíticos.
- La ultrasonicación es un método común en la preparación de muestras para analizar el contenido total de THC en productos del cannabis.
- La extracción ultrasónica se aplica a las muestras antes del análisis por TLC, GC y HPLC.
Extracción ultrasónica de THC
THC o tetrahidrocannabinol (delta-9-tetrahidrocannabinol) es la sustancia química que causa la mayor parte de los efectos psicotrópicos de la marihuana. Se conocen más de 400 variedades diferentes para la especie del cannabis, s. Según la variedad concreta de cannabis, éste puede contener tan sólo un 0,3 % en peso de THC. En otras variedades, el contenido de THC puede alcanzar hasta un 20 % en peso.
Por otro lado, los diferentes productos del cannabis difieren de manera significativa entre sí: la concentración media de THC en la marihuana es de entre el 1 y 5 %; en hachís, el contenido de THC va desde el 5 al 15 %; y en el aceite de hachís está alrededor del 20 %. El THC en la marihuana de uso recreativo es altamente variable y cuanto menor es su contenido, más ha de consumir el usuario para experimentar los efectos deseados.
La preparación de muestras por ultrasonidos se utiliza para determinar el contenido de THC
- Para el control de calidad de productos recreativos con THC
- Para la determinación de la calidad de los productos farmacéuticos con THC
- Para distinguir entre de cáñamo psicoactivo y cáñamo de fibra
Para el análisis de THC, se usan comúnmente los siguientes métodos cromatográficos: Cromatografía en capa fina (TLC), cromatografía de gases (GC) y cromatografía líquida de alta eficacia (HPLC)
Protocolo de preparación de muestras por ultrasonidos para análisis con TLC
Preparación de la muestra: Para preparar las muestras, el material vegetal seco debe ser macerado y molido hasta obtener un polvo homogéneo. Para la extracción ultrasónica, se mezclan 500 mg de polvo de planta de cannabis y 5 ml de mezcla de metanol-cloroformo (proporción de 9:1) en un vial. La sonicación se puede aplicar usando un Ultrasonicador con micropunta, el VialTweeter o el ultrasónico CupHorn. El tiempo de sonicación dura, aproximadamente, 5 minutos. Posteriormente, deje reposar la muestra durante, al menos, otros 5 minutos. Diluya el sobrenadante de color claro con la mezcla de extracción (v/v: 1:10). THC libre: 1 μl en la placa de TLC
Descarboxilación: Se evaporan 100 μl del extracto completamente. El residuo se calienta a 180 °C durante 4 minutos. Añadir 500 μl de metanol-cloroformo (v/v 9:1). Sonicate durante 5 minutos. Diluir el sobrenadante de color claro con la mezcla de extracción (v/v: 1:10).
Calibración: 20 ng, 60 ng, 100 ng, 140 ng
HPTLC:
Gel de sílice para TLC F-254, Merck 5729
TLC escáner II, software CATS3, Camag Muttenz Eluens:
Acetato de etilo:Toluol:Cloroformo = 3:17:0,25 (v/v/v)
Derivatización cromatográfica: Fast Blue Salt 0,1 % en NaOH 0,1 M
Densitometría a 550 nm
Protocolo de preparación de muestras por ultrasonidos para análisis con GC
Preparación de la muestra: El material vegetal seco debe ser macerado y molido hasta obtener un polvo homogéneo. Para la extracción, se mezclan 500 mg de polvo de planta de cannabis y 10 ml de mezcla de metanol-hexano (proporción de 9:1) en un vial. La sonicación se puede aplicar usando un dispositivo ultrasónico de tipo sonda con micropunta, el VialTweeter o el ultrasónico CupHorn. Sonicar la muestra durante 15-20 minutos. Agitar la muestra y dejar reposar durante, al menos, 5 minutos. Diluir el sobrenadante de color claro con la mezcla de extracción (v/v 1:20).
Descarboxilación: en el inserto
Temperatura del inyector 250 ℃
Calibración: de 5 ng/μL a 250 ng/μL
GC: HP 6890 con MSD 5973 e inyector automático 7683: 1μL, tiempo sin división: 2 minutos.
Columna: HP-5 MS, 30 m, diámetro 250 μm, grosor de la película 0,25 μm
Gas portador: He, 35 psi, flujo constante: 4 mL/min.
Horno: 100 ℃ por 1 minuto; aumento de la temperatura de 15 ℃/min hasta 280 ℃; 280 ℃ durante 5 minutos. MSD: SCAN: m/e 35 – 550
Protocolo de preparación de muestras por ultrasonidos para análisis con HPLC
Preparación de la muestra (análoga a la preparación para GC): El material vegetal seco se macera y tritura hasta obtener un polvo homogéneo. Para la extracción, se mezclan 500 mg de polvo de planta de cannabis y 10 ml de mezcla de metanol-hexano (proporción de 9:1) en un vial. La sonicación se puede aplicar usando un Ultrasonicador con sonda con micropunta, el VialTweeter o el ultrasónico CupHorn. Sonicar la muestra durante 15-20 minutos. Agitar la muestra y dejar reposar durante, al menos, 5 minutos. Diluir el sobrenadante de color claro con la mezcla de extracción (v/v 1:20).

VialTweeter para la preparación de muestras por ultrasonidos
Precolumna: LiChrospher 60, RP-Select B, 5 µm (Merck 50963)
Columna: LiChroCart 125-4, Lichrospher 60, RP-Select B, 5 µm (Merck 50829)
Eluyente: TEAP isocrático 36% a 25 mmol/L, cuantificación con acetonitrilo al 64% a 210 nm
Calibración: 0,001 – 0,10 μg/μl
Calibración: 0,01-0,50 μg/μl
Tiempo de retención: para CBD: 6,2 min; para CBN: 8,0 min; para THC: 9,4 min; para THC-A: 11,0 min
LOD: CDB 0,5 %, CBN 0,5 %, THC 0,15 %, THC-A 1 %

UP200St con micropunta para sonicar muestras
Literatura/Referencias
- Werner Bernhard, Franziska Penitschka, Alain Broillet, Prisma Regenscheit (2006): Forensisch chemische Analysen von THC haltigem Hanfkraut. Von der DC via GC zur HPLC-Methode. Applica 2006.
Información interesante
Marihuana Se compone de las flores secas y las hojas y tallos subyacentes de la planta femenina de Cannabis. Ésta es la forma más ampliamente consumida y contiene, aproximadamente, de un 3 a un 20 % de THC. Algunas variedades específicas y cuidadosamente cultivadas alcanzan un contenido en THC superior al 30 %. La marihuana es la materia prima para todos los demás productos derivados del cannabis que contienen THC. Para convertir el cannabinoide más abundante, el ácido tetrahidrocannabinólico (THCA), en THC psicoactivo, se debe llevar a cabo un proceso de descarboxilación. Es decir, el cannabis y sus extractos deben calentarse o deshidratarse para provocar la descarboxilación.
Kifi Se refiere a un polvo, rico en tricomas, que se obtiene de las hojas y flores de cannabis. Se consume tanto en forma de polvo como prensado y se utiliza en pasteles de hachís.
Hachís o chocolate es una galleta o bola de resina concentrada que se produce a partir del kifi prensado o de la resina que se recoje de la superficie de la planta y se moldea en bolas. Presenta varios colores, desde el negro al dorado según su pureza y origen. Se puede consumir bien por vía oral o bien fumado, por ejemplo, en pipa, cachimba, pipa de agua, burbujeador, vaporizador, con un cuchillo caliente, en porros mezclado con flores de cannabis o tabaco, fumado en una botella o empleado como ingrediente alimenticio.
Tintura de cannabis Se refiere al extracto de cannabinoides en alcohol. Los cannabinoides se extraen de la planta de cannabis utilizando alcohol de alta graduación (principalmente, alcohol de grano) para conseguir así la tintura.
El aceite de hachís es una matriz resinosa de cannabinoides producida por extracción con disolvente y transformada en una masa endurecida o viscosa. El aceite de hachís es uno de los productos de cannabis más potentes debido a su alto nivel de compuestos psicoactivos. El uso de aceite de hachís extraído en butano y dióxido de carbono supercrítico ha ganado popularidad recientemente.
Infusiones Se refieren a diferentes tipos de infusiones de cannabis que difieren entre sí por la amplia variedad de disolventes no volátiles que pueden utilizarse para su preparación. Para preparar este tipo de infusión, la materia vegetal de cannabis se mezcla con un disolvente y, a continuación, se prensa y filtra para transferir los aceites de la planta al solvente. La manteca de cacao, la mantequilla, el aceite de cocina, la glicerina y las cremas para la piel se emplean comúnmente como solventes.
Marihuana medicinal Se refiere al uso de la planta de cannabis como terapia con prescripción médica a base de hierbas o el uso de sus compuestos activos, como el THC sintético y los cannabinoides. Este uso generalmente requiere prescripción médica y su distribución se realiza dentro del marco establecido por la legislación local. Múltiples estudios científicos han demostrado que el uso de cannabis o sus derivados actúa contra, por ejemplo, las náuseas y vómitos ocasionados por la quimioterapia, el dolor neuropático y la esclerosis múltiple.